San Xavier fue la primera reducción fundada
por los Jesuitas en 1691, con el nombre de San Francisco Xavier,
y fue sede de una escuela de música y de un taller para
la fabricación de instrumentos musicales.
Hoy en día
es un pueblo agrícola y ganadero, con una importante planta
de producción lechera, que está desarrollando sus
potencialidades turísticas.
Su aspecto rústico,
de calles de tierra y tradicionales casonas, con paredes de adobe
decoradas con motivos misionales y sombreadas galerías
con horcones de maderas, crea un entorno ideal que resalta la
majestuosidad del conjunto misional. Entre las fiestas tradicionales,
las que más conservan rasgo de la época misional
son las celebraciones de Semana Santa, de San Pedro y San Pablo
(29 de Junio) y el Combate y derrota a los Mamelucos (10 de agosto).
A un lado de la plaza, según el esquema urbano de todas
las misiones chiquitanas, se conserva el conjunto misional en
su integridad, con la capilla mortuoria, la iglesia y el patio
del colegio, donde se ubican el campanario y la casa parroquial.
La iglesia fue construida por el padre Schmid en 1749-52 e integramente
restaurada en 1987 bajo la dirección del arquitecto suizo
Hans Roth.
El frente está caracterizado por las imponentes
columnas salomónicas de madera del pórtico y en
la fachada, por la decoración en forma de concha que remata
la portada y las ventanas ciegas.
En las fotografías destacamos nuestra
estadía
en el Hotel Cabañas Totaitu, un lugar excelente para alojarse,
agradecemos a la familia Terán por su gentileza con nuestra expedición.
Llegar a San javier es sencillo, la ruta al norte
que parte de Santa Cruz lleva directamente sobre camino asfaltado.