La Maroc Challenge Spring Edition reunió a un centenar de vehículos entre turismos y todoterreno, matriculados antes de 1997. Este raid low cost transcurrió por Marruecos durante seis apasionantes etapas en las que los participantes debieron ingeniárselas para completar los 2.000 kilómetros del recorrido, entre Guercif y el Erg Chebbi. La presente edición estuvo marcada por la dificultad del recorrido al transcurrir por zonas muy poco transitadas.
Los equipos se citaron en la localidad granadina de Motril para pasar las verificaciones. En el parque cerrado, se reunieron por primera vez modelos tan variados como Ford Sierra, Fiat Panda, Renault 4L, Toyota Celica, VW Golf, Lada Niva, Nissan Patrol, BMW 523, Opel Frontera, Mitsubishi Pajero, Subaru Impreza, Suzuki Vitara, Land Rover Discovery o Peugeot 205, entre otros.
Había presencia de participantes de nueve nacionalidades distintas, procedentes de España, Portugal, Italia, Alemania, Suiza, Gran Bretaña, Gibraltar, Argentina y Marruecos. Algunos pilotos se estrenaban en este tipo de travesías africanas, mientras otros repetían del año pasado y ya contaban con cierta experiencia a sus espaldas.
Todos ellos acudían cautivados por la singularidad de la Marroc Challenge, una travesía off-road pensada para disfrutar de la aventura y recorrer parajes inhóspitos con vehículos con más de 16 años de antigüedad. Lo importante no es acabar primero, sino llegar cada noche al campamento, lo que para estos coches viejos no siempre resulta una tarea fácil. Además, por el camino están obligados a pasar por los way points (puntos de paso) marcados previamente por la organización, siempre dentro de un tiempo máximo establecido y respetando los límites de velocidad para evitar las penalizaciones.
Tras cruzar el Mediterráneo y pernoctar en Guercif, la caravana inició la primera de las seis etapas programadas por pistas y desiertos de Marruecos, rumbo a Erg Chebbi. Todos los días, algún vehículo sufría problemas y debía ser reparados por sus propios tripulantes, en muchas ocasiones gracias al compañerismo de otros participantes. Algunos tuvieron que recurrir al ingenio para salir adelante, con soluciones tan pintorescas como usar una pala de arena para sujetar el motor de un Fiat Panda 4X4 o amarrar con una eslinga la caja de cambios de un Lada Niva para no perderla por el camino.
Pero ni toda la imaginación del mundo hubiera impedido que se produjeran los primeros abandonos antes de llegar a la merecida etapa de descanso en Merzouga. En el hotel Nomad Palace de esta exótica población marroquí quedó instalada la base de la prueba, desde donde encarar los últimos tres días de travesía. Los equipos aprovecharon esas horas de inactividad para recomponer sus vehículos, descansar y recuperar fuerzas.
También fue el día elegido para cumplir con el proyecto solidario que la organización impulsa para mejorar la calidad de vida de los niños y niñas marroquíes. Se repartieron entre escuelas y asociaciones de la zona un total de tres toneladas de material que aportaron los participantes, como ropa, libros, juguetes, equipamiento escolar e incluso un ordenador portátil. Asimismo, se hizo entrega de los 600 pares de zapatos aportados por las firmas colaboradoras Garvalín y Betula; y de las mil gafas graduadas donadas por la ONG Visió Sense Fronteres.
Tras la jornada de reposo y solidaridad, a los participantes les tocó afrontar la primera de tres etapas bucle por las dunas de Merzouga que hicieron las delicias de estos intrépidos aventureros. Eso sí, pocos se libraron de quedarse enganchados en la arena y el siempre traicionero fesh-fesh, debiendo ser rescatados con eslingas, sobre todo aquellos que no disponían de tracción a las cuatro ruedas. A diferencia de otras ediciones, el recorrido pasó por pistas poco transitadas y en mal estado, lo que puso en aprietos a la mayoría de equipos, por lo que la organización decidió buscar alternativas que permitieran rebajar el nivel de dificultad en el futuro.
Para el último día, estaba reservada una gran etapa final por las viejas pistas del Dakar africano, visitando el oasis del Saf Saf hasta llegar a Erg Chebbi, donde se celebró una emotiva ceremonia para dar la bienvenida a los héroes que lograron 'sobrevivir' a los 2.000 kilómetros de aventura. Durante esa celebración se entregaron los premios para las diferentes categorías, establecidas según el nivel de dificultad elegido (Adventure y Advance) y en función de tracción de los vehículos (4x2, 4x4 y 4x4L).
Entre los más expertos de la categoría Advance, el equipo Julio Tomas Competición hizo doblete en 4X2 y 4x4L (4x4 ligero), al volante de un Mercedes 190 y un Subaru Imprezza respectivamente, mientras que el primer todo terreno clasificado fue el Land Rover Discovery del Pistacho Team. En Adventure, los líderes en 4x2 fueron el Team Kubelwagen (VW Kubelwagen T181) y en 4X4, el Maresme Extrem III (Suzuki Samurai). El Trofeo femenino se lo levaron las chicas del Lady Niva Team (Lada Niva).
La Maroc Challenge Spring Edition 2013 se desarrolló sin incidencias y la organización valoró muy positivamente la utilidad del sistema vía satélite comercializado por la empresa TraceMyWay con terminal Spot. Este innovador mecanismo que llevaban todos los vehículos permitió a aficionados, familiares y patrocinadores realizar un seguimiento de los corredores en tiempo real, además de convertirse en una herramienta de seguridad y de logística ideal para los responsables del raid al tener controlados en todo momento a los integrantes de la caravana.
Rui Cabaço (Organizador): "Ha sido una de las ediciones más duras de las que llevamos celebradas hasta el momento y no porque fuera nuestra intención, sino porque se ha celebrado por zonas menos frecuentadas y pistas en peores condiciones. Quiero expresar mi gran admiración a todos los participantes que, con coches prácticamente de serie, superaron pasos realmente complicados que castigaron mucho su mecánica, sobre todo los 4x2. Algunos debieron recurrir a la imaginación para reparar las averías con muy pocos medios, siendo auténticos 'McGiver' y demostrando una gran perseverancia. El ambiente fue genial, cumplimos con nuestra misión solidaria y todo el mundo disfrutó de una experiencia inolvidable".
La organización ya está trabajando en la Maroc Challenge Winter Edition que se celebrará del 29 de noviembre al 6 de diciembre, sobre un recorrido cargado de sorpresas.
